Su nombre es Gabriel Ares (Betanzos, 2005), pero en el vestuario del San Tirso le conocen como Brichu. Viene de ser titular en la importante victoria ante el Órdenes, que les pone en disposición de terminar la primera vuelta en puestos de playoff de ascenso, el objetivo que se marcaron en una temporada que inició con el foco en la Copa del Rey, experiencia que no olvidará nunca.
Para él, la clave del triunfo por 1-3 en Vista Alegre fue aprovechar los momentos. “A nivel defensivo concedimos muy poco en la primera parte. En la segunda generaron bastante más porque hicieron unos cambios que revolucionaron un poco todo. En lo ofensivo aprovechamos bastante bien las ocasiones”, resume.
Fue su tercera titularidad este curso, la segunda en partido de Liga. “Me encuentro bastante cómodo. Los compañeros me ayudan y apoyan mucho, sobre todo los más veteranos”, destaca.
¿Cómo cree que podría jugar más? “Aportando más defensivamente y ayudando mucho con balón”, contesta con franqueza.
“Al tener la Copa del Rey nos despistamos un poco, pero ya estamos ahí. Es el objetivo desde principio de temporada”, reconoce sobre la opción de jugar playoffs, zona que ven a un punto a falta de un choque para acabar la primera vuelta.
En las categorías inferiores del Dépor jugó a veces de central, pero su posición habitual es la de lateral izquierdo. “Creo que defensivamente puedo mejorar bastante aún, poco a poco voy cogiendo confianza con más minutos y eso me ayuda mucho para ganar más duelos”, explica sobre lo que debe ir potenciando.
Hace un par de meses convirtió el penalti definitivo ante el Selaya que les dio pie a jugar contra el Espanyol en Copa del Rey. “Fue la primera vez que tuve contacto con la prensa y la gente de mi pueblo me felicitaba por la calle. En cuanto a Riazor, en la final de la Copa de A Coruña ya había ido convocado, pero esta vez fue mucho más bonito y con más ambiente. Por momentos estuvo igualado y lo disfrutamos mucho”, cuenta un Brichu que reconoce que sueñan con repetir.