“Tenemos muchas ganas de ganar en Riazor, es una oportunidad, se lo he dicho a los jugadores”. Consciente de lomucho que hay sobre el tapete de Riazor esta tarde, el técnico del RC Deportivo de La Coruña aspira a reengancharse a la pelea por el ascenso directo ante un ‘gallito’ como el Nàstic.

Los blanquiazules llegan a la cita catapultados psicológicamente por una serie de buenos resultados a domicilio, cuatro puntos sobre seis en dos contiendas en los que el grupo ha tenido que sobreponerse a diferentes adversidades.
 

Ya fuera de los inquietantes puestos de descenso, el cuadro coruñés se dejará el alma para certificar su primer triunfo en casa en el ejercicio 23-24 para así disipar sus fantasmas en el municipal herculino.
 

Hasta la fecha, el Depor solo ha podido rascar tres puntos de doce como anfitrión en el torneo de la regularidad, fruto de tres igualadas ante Rayo Majadahonda, Teruel y Cornellá, mientras que el Celta Fortuna consiguió llevarse un botín en forma de victoria.
 

El preparador deportivista, Imanol Idiakez, confía en el tesón y polivalencia de su plantel para maquillar las carencias, sobre todo ofensivas, de un grupo mermado por las lesiones.
 

Aunque finalmente esta semana se han apuntado a última hora Ximo Navarro, Balenziaga y Salva Sevilla, lo cierto es que las ausencias de Yeremay o Barbero restan opciones en ataque; además, Jaime Sánchez tampoco ha podido superar sus molestias y no se vestirá de corto.
 

Siguiendo un axioma futbolístico tan certero como “lo que funciona no se toca”, el míster otorgará continuidad a la base del once que dio una lección de resiliencia en El Toralín y que venció con más oficio que brillo en la Nova Creu Alta.
 

Es decir, siempre con Ian Mackay bajo palos, la defensa estaría configurada por los ‘pablos’ en el eje central, Vázquez y Martínez, flanqueados por Paris Adot —Ximo dispone también de opciones— en la derecha y por el ‘renacido’ Retu en el costado izquierdo.
 

En la sala de máquinas, el Deportivo presentará un conglomerado de trabajo y calidad con un ‘trivote’ configurado por José Ángel, Villares y un Salva Sevilla que se ha colado en la lista con lo justo de forma.
En punta de lanza actuará un canterano con hambruna de gol como Martín Ochoa, que ya se estrenó en Sabadell como realizador, mientras que por la derecha saldrá un Lucas Pérez deseoso de inaugurar su cuenta goleadora y por la izquierda, el cañón de Hugo Rama que el de Oroso también desea encender.

Falta de gol

Los futbolistas del RC Deportivo tratarán de invertir la tendencia goleadora tan pobre que han firmado esta temporada, con apenas ocho conversiones en nueve jornadas.
 

Ante el Nàstic es previsible que no haya demasiadas posibilidades de marcar, por lo que un elevado grado de acierto se antoja crucial para lograr el éxito.
 

El Nàstic de Tarragona, por su parte, se instaló en la zona alta de la clasificación tras un arranque espectacular, con 16 sobre 18 puntos conquistados.

Los de Dani Vidal, sin embargo, han comenzado a padecer el mal de alturas y no han sumado de tres en tres en su última terna de enfrentamientos.
 

En un Riazor lluvioso pero que presentará una notable entrada, la grada herculina empujará al máximo para ganar.