El técnico de Unionistas, Dani Ponz, reconoció ante la victoria del Depor que se habían medido a un equipo "Sensacional, un nivel de flow, de movimientos, evolucionado, sumando muchos efectivos por delante del balón, un equipo muy distinto al del inicio, lo han hecho realmente bien", dijo en sala de prensa.
Cree que el ambientazo de Riazor, con más de 26.000 aficionados en la gradas, pudo hacer mella a alguno de sus futbolistas. "Me sabe mal que el ambiente haya sobrepasado a nuestros jugadores, queríamos darle más continuidad al juego, porque sabíamos que ellos podían sufrir, pero no estuvimos finos. Me quedo valorando el trabajo y el desgaste que hemos hecho, pero nos ha faltado acierto para darle más problemas", indicó tras el duelo.
Para el preparador habían tenido "gen competitivo, pero no el tacto suficiente con el balón. Ha sido complicado, nos hemos medido a un un equipo sensacional, con las cosas bien hechas, que merece donde está, por méritos propios y con un ambiente sensacional".
Sobre los cambios, con la entrada Rastrojo por Serrano comentó que el Depor les estaba "dañando con el ascenso de Ximo, el corte de Mella o de Villares", aunque matizó que no habían podido "neutralizar (con los cambios) el ataque deportivista". Asimismo, dijo que era "una pena que se meta el gol en una jugada tan desgraciada (por el tanto de Barbero)".
Admitió que el resultado pudo ser más abultado y comentó que la juventud de su equipo ante un escenario así le hacía llevarse sobre todo aprendizaje. "Pudo caer alguno más, es la realidad, pero si estuviéramos menos precipitados en la parte final… Somos un equipo bastante joven, esto es lo que es, un aprendizaje. Esto es un entorno de otra categoría, lo hemos hecho mejor en otros entornos similares, pero ellos están un paso por delante y se ha notado. Llevábamos mucho tiempo sin perder fuera de casa, hemos perdido quizá en el entorno más difícil de la categoría, los chavales se han vaciado pero no han tenido acierto con el balón", zanjó.