El Arzúa ha sido el único equipo de la liga que ha ganado a los dos filiales. El pasado domingo se impuso en O Viso (2-1) al Fabril en un partido vibrante con dos penaltis y con un gol decisivo en el minuto 84. El sábado jugará en O Carral contra el Sofán. Manuel Losada ‘Chollas’ valora la actual racha de su equipo tras un inicio en el que le costó conseguir la primera victoria.
Seis partidos seguidos sin perder después de cinco sin ganar. ¿Qué explicación le da?
La pretemporada fue incontrolable. Solo pudimos jugar tres amistosos porque tuvimos dos parones por distintos casos COVID. Además, sufrimos lesiones graves de futbolistas importantes e incorporamos a dos jugadores la semana de la primera jornada. En las cinco primeras jornadas estábamos fallando lo infalible de forma exagerada. El hecho de que ahora llevemos cuatro victorias y dos empates es a consecuencia de empeño y constancia. Entrenando como estaban entrenando estos jugadores era cuestión de tiempo que llevasen los resultados positivos. Es algo que siempre se dice pero era para grabar cómo entrenaban cuando las cosas iban mal. En seis partidos han conseguido remontar seis puestos y, si no eres muy fuerte de coco, es imposible.
En el último partido, contra el Fabril utilizó tres sistemas.
Teníamos previsto uno para la fase defensiva y uno para la ofensiva pero, por circunstancias del partido, tuvimos que usar otro que ya hemos utilizado en otros encuentros. Tú juegas, pero el rival también y, a veces, te somete. Y, si es tan bueno como el Fabril, te obliga a modificar tu plan de partido.
El Depor B tuvo un larguero y varias situaciones de peligro pero, ¿percibió que su equipo sufrió durante el partido?
El Fabril es determinante por fuera y, al principio del partido, nos generaron problemas porque caía un medio generando superioridad fijando a nuestro lateral o haciéndole saltar a destiempo y desajustándonos. Lo corregimos con uno de nuestro mediocentros y, ya en la segunda parte, con el cambio de sistema.
En Arzúa te dejan trabajar, confían a muerte en ti y todo es muy familiar
Uno de los detalles llamativos del partido fue un debate entre banquillos en el que se percibía molestos a los dos entrenadores.
Son lances del juego, cosas del partido. Óscar es un hombre con el que se puede hablar y fue muy educado aunque pareciese que estaba muy enfadado.
El Arzúa es el único equipo de la liga que ha ganado a los dos filiales.
Los dos son grandes equipos, con un ritmo altísimo y con jugadores determinantes. Creo que jugamos mejor contra el Polvorín pero hay que decir que su campo ayuda mucho para desarrollar un estilo de juego más combinado que es el que, siempre que podemos, buscamos. En O Viso es mucho más difícil combinar por sus dimensiones.
Después de ganar al Fabril, el Arzúa juega contra el colista. ¿Todo lo que no sea ganar sería dar un paso atrás?
No puede engañarnos la clasificación y es algo en lo que estoy insistiendo esta semana. El Sofán es un equipo muy complicado, trabajado y muy trabajador. En la última jornada hizo un grandísimo partido contra todo un Somozas, así que relajación cero. Nunca hablo de ganar o de perder a mis futbolistas. Solo les insisto en seguir el plan de partido trabajado y en que den todo lo que tienen porque eso es lo que más nos acercará a la victoria.
¿En qué tipo de campos sufre más su equipo por las características de sus jugadores?
Somos muy versátiles en todos los sentidos. Individualmente muchos pueden jugar en distintas posiciones y colectivamente nos adaptamos a cualquier campo y tipo de partido. Podemos ser dominadores y gestionar bien el balón, contraatacar e incluso jugar directo. Sin embargo, yo creo que los campos grandes nos van mejor.
En O Carral, ¿se verá a un Arzúa diferente en cuanto a planteamiento?
El equipo tiene una manera de jugar y de competir pero, como cada semana, se modificarán cosas para este partido.
Una plantilla larga suele dar quebraderos de cabeza a los entrenadores, pero la del Arzúa parece demasiado muy corta.
Cuando confeccionamos la plantilla queríamos que fuese corta y con jugadores polivalentes. Y eso es lo que tenemos. Es corta pero compensada y con todo el mundo enchufado. El inconveniente es cuando se juntan muchas circunstancias adversas, sanciones y lesiones, con las que te quedas muy justo de efectivos. Por eso creo que necesitamos algún jugador más.
Los entrenadores somos masocas; esto genera enemistades gratuitas
Después de dos experiencias complicadas en Montañeros y As Pontes, ¿ha dado con su sitio en el Arzúa?
He trabajado y me he dejado la vida en todos los clubes en los que he estado, aunque los resultados no siempre fueron los esperados. Antes de As Pontes y Montañeros venía de temporadas con muy buenos resultados, un ascenso, una Copa de A Coruña… El fútbol a veces es cara y otra cruz. Después de ver solo la cara pude conocer, y en profundidad, la cruz. Ahora estoy en el Arzúa y este club es otra historia. Siempre te comentan, jugadores o entrenadores, lo bien que estuvieron aquí pero, hasta que no estas aquí, no lo sabes realmente. Siempre pienso que lo peor que le puede pasar a un entrenador es sentirse solo y tengo que decir que nunca me he sentido tan arropado como en el Arzúa. Incluso cuando los resultados no eran buenos, gente del club me escribió para decirme que las sensaciones eran buenas y que los resultados terminarían llegando. Aquí te dejan trabajar, confían a muerte en ti y todo es muy familiar, humilde y cercano.
Esas dos etapas negativas, ¿le han hecho cambiar?
Eso es aprendizaje y ayuda a relativizar muchas cosas, a entender que no todo depende de ti, a ser mejor entrenador e ir cogiendo experiencias importantes. Los entrenadores somos masocas. Entrenar es algo que desgasta muchísimo, que te quita mucho tiempo de tu vida personal. Te llevas muchísimos palos de todos sitios, te genera enemistades gratuitas y, aún así, seguimos ‘enganchados’. La profesión de entrenador, si la analizas fríamente, tiene más contras que pros pero algo tendrá si, a pesar de ello, seguimos ‘picando’.
¿Qué regalo le pedirá Chollas por Navidad a su director deportivo?
Lo ideal sería incorporar a un par de jugadores, pero sé dónde estoy. No tenemos el poder económico de la mayoría de los clubes de esta categoría y la ubicación geográfica es complicada. Yo estoy contentísimo con lo que tengo pero, volvemos a sufrir una mala racha de lesiones y sanciones, nos veremos en la misma situación que hace unas semanas y eso significaría problemas. Sé que Taquio está trabajando duro en ello, pero no es fácil fichar jugadores en invierno. Es difícil hacerles ver lo bien que se está aquí hasta que no comprueban por sí mismos. Espero que los Reyes se porten bien.