El pasado 14 de febrero se puso fin a un impresionante récord que el Deportivo Abanca había mantenido intacto desde su fundación. El equipo coruñés no había sufrido ninguna expulsión desde su fundación, allá por 2016, hasta que la defensa Noelia Villegas vio la roja directa el pasado domingo en el encuentro disputado en Abegondo ante el Real Betis (1-3) por despejar con la mano un disparo de Oriana Altuve que iba a puerta.
4 años y poco más de 5 meses. Han pasado un total de 1.624 días sin expulsiones desde que el Depor femenino jugó su primer partido oficial el 4 de septiembre de 2016 en Ponte dos Brozos ante el Oviedo Moderno (0-0) hasta la desafortunada acción que protagonizó el domingo la lateral izquierda andaluza.
Sin violencia
El cuadro blanquiazul ha dejado el récord de compromisos oficiales consecutivos sin expulsiones en 121 (78 encuentros en tres campañas en Segunda División, cuatro partidos de promoción de ascenso a Primera Iberdrola, 37 duelos en la máxima categoría y otros dos más en Copa de la Reina). El juego limpio llevado al extremo. De hecho, ni siquiera su primera expulsión es consecuencia de una acción violenta o brusca, sino que se produjo tras una desesperada decisión tomada en una décima de segundo en una situación límite.
Era el minuto 55 del choque ante el Betis y el Depor disfrutaba de cierta inercia positiva tras recortar distancias en el marcador (1-2). No obstante, un centro desde la banda izquierda de la bética Medina provocó la salida de la portera Sullastres y el posterior remate de Altuve en el rechace. El balón se dirigía a gol, con Sullastres vencida, y Villegas hizo un paradón con todo el disimulo que pudo. No fue suficiente. La árbitra la cazó y le enseñó el camino de los vestuarios. Sosa no falló desde el punto de penalti y subió el 1-3 al marcador que a la postre sería definitivo.
El perdón de Ville
Al término del encuentro, Manu Sánchez, entrenador del Depor Abanca, comentó la acción en rueda de prensa e incluso bromeó con la posibilidad de que la jugada fuese su culpa debido a un ejercicio realizado en un entrenamiento previo.
“Ville estaba pidiendo disculpas al equipo por la expulsión pero no las tiene que pedir porque es una acción de inercia e intuitiva. No pienso que tenga que pedir perdón por eso. La culpa es mía porque hicimos una tarea de entrenamiento donde cada jugadora en algún momento pasaba a ser portera y Ville es una jugadora disciplinada”, apuntó el técnico al mismo tiempo que admitía no querer frivolizar con lo sucedido en el terreno de juego.
103 tarjetas amarillas
En todo este tiempo sin expulsiones, el Deportivo ha recibido un total de 103 tarjetas amarillas repartidas de la siguiente forma: 8 en Segunda en la 2016/17 (Miga, Malena, Raquel, Miriam, Teresa -2-, Nuria y Gaby); 11 en Segunda en la 2017/18 (Raquel, Miriam, Teresa, Lía, Mérida -3-, Iris -2-, Jone y Cris Oreiro); 20 en Segunda en la 2018/19 (Iris -5-, Teresa -3-, Raquel -2-, Gaby -2-, Cris -2-, Alba Merino -2-, Peke, Maya, Ali y Miriam); 3 en el playoff de ascenso de la 2019/20 (Alba Merino -2- y Mérida); 27 en Primera en la 2019/20 (Maya, Villegas, Misa, Miriam, Nuria -2-, Kika -2-, Alba Merino -5-, María Méndez -2-, Iris -4-, Arbeláez -2- y Teresa -4-);
2 en Copa de la Reina 2019/20 (Sullastres y Nuria); y 32 en lo que va de Primera Iberdrola 2020/21 (Villegas, Helena, Alba Merino -7-, Cris -2-, Patri López, Gaby, María Figueroa, Athenea -4-, Ainoa -4-, Blanco -3-, Noe Bermúdez, Iris -3-, Arbeláez -2- y Lady Andrade).