La falta de gol es un lastre demasiado pesado para un RC Deportivo que no ha sido capaz de comulgar con el tanto en las últimas cinco jornadas.
Sabedores de que el equipo debe desprenderse cuanto antes de un peso añadido que les impide emprender el vuelo en el clasificación, los dos delanteros con mayor peso específico en el club, Claudio Beauvue y Nicolas Fedor, ‘Miku’, se quedaron ayer media hora de manera voluntaria ensayando una y otra vez el remate a puerta, ante el cancerbero canario Carlos Abad.
Así, a la conclusión del entrenamiento matinal, los dos atacantes testaron los reflejos del actual meta titular blanquiazul, con una interminable tanda de finalizaciones en las que alternaron auténticos golazos con tentativas erróneas.
Con el partido ante el Guijuelo en mente, ambos goleadores aguardan romper la mala racha de efectividad y resultados que ha resembrado las dudas en el vestuario de una escuadra confeccionada para el ascenso.
Perfilando su once
El entrenador deportivista Rubén de la Barrera comenzó a perfilar el once para el próximo duelo, si bien introdujo en este mismo a algún futbolista con menos opciones, como el caso del juvenil Pablo Trigo.
El míster alineó en el cuadro sin peto a una formación integrada por Carlos Abad; Jorge Valín, Álex Bergantiños, Borja Granero, Héctor Hernández; Pablo Trigo, Uche, Diego Villares, Rayco; Raí y Beauvue.
A lo largo de la presente semana el técnico introducirá retoques en su equipo, si bien la buena actuación de los jóvenes talentos Rayco y Villares el pasado domingo frente al Coruxo les confieren opciones a ambos para actuar de inicio el domingo en Riazor ante el Guijuelo.
Además de las probaturas tácticas, el ‘staff’ técnico de De la Barrera diseñaron un entrenamiento de más de hora y media de duración en la que los jugadores desarrollaron varios ejercicios diferentes de posesión del esférico y un partidillo bajo un formato de once contra once.