Javi Vega (Leganés, 5 de enero de 1988) volverá a jugar mañana (20.00 horas) en el Palacio de los Deportes de Riazor, el que fue su hogar en la tres temporadas precedentes, en dos de las cuales ejerció como uno de los capitanes del Leyma Basquet Coruña. Una vuelta ‘a casa’ que el veterano ala-pívot califica de “especial”.
¿Cómo estás tú y cómo está tu equipo?
Bien. Después de la última victoria (por 96-62 frente al Melilla), cambia todo mucho. Tanto de un lado como de otro. De un Coruña imbatible, que no bajaba de cien puntos, y mete cincuenta, a nosotros, que no pasábamos de setenta y casi llegamos a los cien.
No jugaste los dos primeros partidos a causa de una lesión.
Me cayó un compañero encima de la tibia y rompí una parte del ligamento interno de la rodilla. Afortunadamente se regenera solo y solamente estuve tres semana de baja. Contra Tizona ya jugué seis minutos, contra Cantabria algo más y el primero, en teoría, en buenas condiciones, fue el último.
Jugaste y enchufaste (anotó 17 puntos).
La verdad es que tuve suerte y me entraron los triples, sobre todo en la segunda parte.
Estamos recuperando piezas, reestructurándonos y creando nuestra identidad
Pero para enchufar, el Leyma en esos dos partidos que siguen en boca de todos. ¿Es irreal tanto lo de ellos como lo vuestro de no llegar a los setenta puntos?
Bastante, sí. Coruña es un equipo de ochenta y cinco o noventa puntos, en condiciones normales. Ya el año pasado éramos de una media de ochenta y siete. Y creo que por ahí andarán este año. Mismo juego, mismo entrenador... Los 119 no es algo normal. Ni los 51. Nosotros, por forma de jugar y el talento que tenemos, deberíamos anotar más.
Vuestro calendario de inicio tampoco fue sencillo.
Esta liga es muy de dinámicas, y el Tizona de ahora no es el Tizona de diciembre o el Oviedo de ahora no es el de enero. Si Gipuzkoa no pilla en la cuarta jornada, a lo mejor nos gana, y en la primera le ganamos. No hemos tenido suerte. Y además, sin que sirva de excusa, hemos tenido las lesiones de Hasbrouck y Ogunsipe, jugadores llamados a ser de los más importantes del equipo, pero ahora que hemos cogido más ritmo debería verse el verdadero nivel del equipo.
¿Tenéis un objetivo concreto?
Al final la liga te pone en tu sitio, pero creo que la lucha nuestra tiene que ser por entrar en playoffs, y a partir de ahí, si el equipo da más, intentar mirar más arriba, pero siempre con los pies en el suelo, porque está todo muy igualado.
Se me va a hacer raro porque parece que todavía no me he ido de A Coruña; hace dos meses todavía vivía ahí
Partís, respecto al Leyma, con una desventaja: ellos han renovado a siete jugadores y vosotros tenéis siete nuevos.
Ese es uno de los fuertes del Coruña en estas primeras jornadas, donde haber podido mantener el bloque se nota. Es un punto a su favor, como tener varios jugadores ‘top’ de la liga; a priori, están un peldaño por encima de nosotros.
En términos de porcentaje de rendimiento, ¿dónde está ahora mismo el Lleida?
Bajos. Estamos recuperando piezas, reestructurándonos y creando nuestra identidad. Nos falta mucho trabajo.
¿Te ha preguntado tu entrenador por cosas de tu exequipo? O aquí ya se conocen todos y todo..
Más o menos ya se conocen, pero algunos secretillos que no se ven en vídeo, como “a este si te pones más duro, le molesta”. También a nivel de jugadas le puedo echar una mano.
¿Será el Leyma mucho más fuerte con Burjanadze?
Con Beqa, para mí, su juego interior es el mejor de la liga. Los equipos de Epi son muy trabajados, y si cogen una buena dinámica, pueden ser un martillo, pueden ganar muchos partidos seguidos. El año pasado ganamos nueve.
Volver a A Coruña es...
Especial. Sobre todo porque está muy reciente; hace dos meses aún estaba viviendo ahí. Se me va a hacer raro porque parece que todavía no me he ido de allí. Pero voy con muchas ganar de ganar, también para vacilar un poco a mis excompañeros.