Cinco goles de Iván Barbero, otros cinco de Lucas Pérez, dos de Raúl Alcaina y uno cada uno de Yeremay, David Mella, Davo, Pablo Martínez y Pablo Vázquez. Un total de 17 tantos a favor en las cuatro últimas jornadas de Primera Federación. El Deportivo es el responsable de estos registros que suelen estar ligados a épocas pretéritas del fútbol de cinco delanteros y marcadores abultados. De hecho, el equipo coruñés no marcaba tal cantidad de goles en cuatro partidos consecutivos de liga desde los años 60 y las únicas seis ocasiones en las que superó las 17 dianas se produjeron entre 1939 y 1963.
El récord absoluto de goles en cuatro jornadas de liga consecutivas corresponde al Deportivo de la temporada 1940-41 en Segunda División, que ni siquiera necesitó ganar los cuatro partidos para hacer 20 tantos. El equipo de Hilario Marrero, jugador y entrenador, superó a Gijón (1-3) y Baracaldo Oriamendi (9-0), empató frente al Salamanca (1-1) y arrolló al Racing de Santander (7-0) en las cuatro primeras jornadas.
El podio de este apartado lo completan dos versiones del Deportivo que lograron 19 tantos en cuatro jornadas. No obstante, el equipo blanquiazul de la temporada 1950-51 lo hizo en Primera División. El argentino Oso Díaz dirigía al Depor que logró la mayor goleada de la historia del club en liga, 10-1 al Lérida, y que acompañó con otras tres victorias ante Real Madrid (5-0), Valencia (0-3) y Alcoyano (0-1). Algo más de una década más tarde, al inicio de la temporada 1963-64, el Depor de otro entrenador con nacionalidad argentina, Roque Olsen, alcanzó los 19 goles en Segunda División al batir a Langreo (1-4), Gijón (4-1), Burgos (2-3) y Constancia (8-0).
Por último, por delante de la explosión goleadora del actual Deportivo de Imanol Idiakez únicamente se encuentran otros tres equipos con 18 dianas en cuatro partidos de liga seguidos. Uno de ellos es nuevamente el Depor de Hilario Marrero de la 1940-41, que también llegó a los 17 en otras dos ocasiones. Además, el equipo dirigido por Francisco Graña en la 1939-40 y el entrenado por Gabriel Andonegui en la 1948-49, ambos en Segunda División, también llegaron a los 18. Una cifra rozada por el Depor actual, convertido en un rodillo de otra época.