Miguel Otero es uno de los consejeros que acompañaron a Fernando Vidal esta semana en su visita a nuestro diario.
¿Le sorprendió que el presidente le llamara para formar parte de su equipo?
Yo estaba totalmente desconectado, tenía otros proyectos profesionales, y cuando me llamó, sí me sorprendió, pero no tardé en decidirme porque me convenció como persona. También valoré que diera el paso de llamarnos a Richard (Barral) y a mí porque son pasos de valentía. Ha unido gente muy distinta entre nosotros, pero cada uno llega a un sector determinado, y eso es importantísimo para buscar la unidad que tanto ansiábamos. Es un paso doblemente por el tema social, porque estábamos acostumbrados a un clima social que veíamos en todas las asambleas que era muy problemático. Con esa valentía y viendo un poco el equipo que iba, fue fácil decidirse.
Ha tenido un papel clave en varias etapas y a veces se le ha criticado, así que ahora será un momento de alegría.
De enorme satisfacción, sobre todo por el equipo con el que voy, por el ‘presi’ y porque partimos con el contador a cero. Se viene aquí para sumar y sin reproches, es lo que sentimos por el bien del club y eso se queda en el pasado. Cada uno ya sabe lo que se ha vivido en todos los aspectos y tiene que ser una premisa total.
Su conocimiento como exconsejero del Lugo ayudará en el trato con otros clubes.
Sí, pero también es verdad que ahora la magnitud es distinta. Viví el mundo del fútbol desde el CD Lugo, estuve 32 meses, una etapa preciosa y quedé súper agradecido, pero si lo comparamos con la magnitud del Depor, la diferencia es muy importante. Después de haber pasado por la Federación de Peñas, llegué al Lugo para encargarme un poco del tema social, campañas de abonados, después comunicación, márketing... fui asumiendo diferentes parcelas hasta que llegué a bastantes y fue una experiencia gratificante.
Abanca aporta para este mercado de invierno el doble que en la ampliación de 2014
Como defensor que siempre ha sido del accionista minoritario, ¿cómo ve la entrada de Abanca en el Deportivo y el nuevo proyecto?
Una vez que el ‘presi’ explique realmente la magnitud de todo ello... Todo esto viene desde que en la época de Augusto (Lendoiro) se eliminara el 1%, fue un momento clave, ese y la ampliación de capital de Tino en 2014. Ya en ese momento, tanto Tino como Estrella Galicia tienen el foco permanentemente, tienen el control del club y el minorista tampoco puede hacer nada. Entonces, en ese caso creo que para el accionista minoritario lo que siempre está en la calle es que ese modelo de gestión no funciona, pero seguimos teniendo el problema económico, de ahí que en la calle se hable de que tenga el control económico alguien como por ejemplo la entidad Abanca, con un fondo de comercio tan radicado, que sabes que no corre peligro lo que pueda llegar a hacer y que, además, aporte una cantidad importante que nos solvente la parte económica, yo creo que eso va a ayudar a nivel social.
Pero Abanca no va a estar ahí siempre.
Interviene Fernando Vidal: En el 2007, se elimina el tope salarial y el Consejo de Administración liderado por Augusto (Lendoiro) busca inversores fuera de Galicia. Si Abanca mañana decide vender sus acciones, eso no se puede evitar y esperemos que esté muchos años vinculada al Deportivo. Ese es un tema que puede estar, pero no lo veo a corto plazo, no creo que Abanca vea este proyecto como una compra o un negocio, sino como algo que es importante para ellos tener esa repercusión en la ciudad, donde tienen su sede principal.
M. Otero: Abanca aporta para este mercado de invierno el doble de la anterior ampliación de capital de 2014 y simplemente para intentar salvar la categoría, que te da un músculo económico importantísimo.
Las anteriores ampliaciones de capital fueron un fracaso.
Interviene Vidal de nuevo: Todas, por eso el modelo popular fracasa. ¿Cómo se mantiene? En Primera División y sin deuda, precioso, pero no estamos en Primera y con una deuda enorme.
¿Mantiene la idea de aplicar la tecnología en las relaciones con el abonado?
Sí, en el futuro sí que se empleará más la tecnología, aunque en ese aspecto puede apotar más mi compañero Fede (García Poncet). Pero, como bien dijo el ‘presi’, ahora mismo no puede haber otro objetivo que la salvación.
¿Le quedó alguna espina clavada de las aventuras anteriores, de algún proyecto que tenía en mente y no pudo sacar adelante?
No, incluso ahora mismo creo que estoy agradecido y contento de formar parte de este.
Fernando Vidal: “Sé a quién llevo en todo momento”
El presidente, Fernando Vidal, muestra su plena confianza en Miguel Otero.
¿Fue el más cuestionado de sus consejeros?
Fernando Vidal: Yo no he notado nada. Cuando apuesto por una persona, apuesto al cien por cien, estoy a muerte con ellos y sé que van a estar a muerte conmigo. Sé a quién llevo en todo momento, no llevo a ningún desconocido y sé lo que van a aportar. A lo mejor, mucha gente se equivoca respecto a lo que puede aportar Miguel. Tiene unas facetas en las que es un auténtico monstruo porque es un tío con una capacidad de trabajo bestial, de esos que duermen poco, es pesado porque le gusta trabajar, es muy perfeccionista.
Dada su experiencia con las peñas, ¿se encargará del tema social?
En el club tenemos a gente perfectamente preparada para esos temas como Juan Lagarda, yo lo quiero para otras cosas y creo que la labor que va a hacer ahí va a ser cuando menos tranquilizadora para mí. Lo que piensen los demás no me predispone sobre nadie. Yo he escuchado cosas negativas sobre personas, pero luego a la gente la conozco, veo lo que hay y yo al final lo que quiero son realidades. Yo los conozco a todos, a cada uno de ellos, sé lo que pueden dar de sí y creo que son gente idónea y totalmente capacitada para estar en este cargo. Lo que me cuenten no lo filtro, no me gustan los dimes y diretes, me quedo con las personas en sí y Miguel es un consejero más, importante como todos.
Miguel se quedó fuera del primer consejo, el que presidió Armenteros.
Fue casualidad, un tema de proximidad. Había seis y quedamos fuera Miguel y yo. No fue premeditado.
